En la película libertarias, Ana Belén (otrora la sonrisa del PCE) pega en la puerta de la casa de citas y cuando la prostituta abre la puerta, el personaje de Ana Belén dice:
- He venido a liberarte.
- ¿De qué?- contesta la prostituta.
Era propio del lumpen la falta de conciencia, y de los libertarios la conciencia.
Cuando la libertaria ilustra a la prostituta con la imagen de otros veinte años al servicio de los cerdos consigue convercerla de que abandone una vida que se le antojaba tan lucrativa.
Tampoco pone la película muy bien al clero, excepto en la persona de Bosé. Pero , amigos católicos, amigos liberrtarios, otros amigos, no hay que escandalizarse. Pastores aficionados, verdaderos, o hipócritas, los hay en cualquier rebaño.
Me parece que Cristo nunca se rasgó las vestiduras.
jueves, 2 de diciembre de 2010
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Sobre todo porque es interesante tomar al rebaño como punto de vista. Y ver si las ovejas son clónicas, incluso si son ovejas, o no.
ResponderEliminarY curarse en salud, porque hoy algunos desalmados licenciados en todas las disciplinas declaran sin rubor desde los foros públicos que hay exceso de población.
Tanto si la oveja no se considera oveja como si se se cree con derecho a bunker el resultado puede ser el mismo.
Si Buñuel levantara la cabeza.
No lo entiendo Verónica,
ResponderEliminarDebe ser que estoy ....
Esto va en contra de los....
Did you come here to play Jesus
to the lepers/leprous? in...
Es esto lo que quieres decir, como dice la canción?
Pues no, quizá tú piensas que es too late
ResponderEliminarto drag the past out into the light y sí pero no,estoy más de acuerdo con Salvatore Quasimodo.
Es decir que más bien:
ResponderEliminarLove is a temple
Love a higher law
and
one love
one blood,
one life.